Para: EL OTRO LADO DE LA LUNA

Abrazarte en la distancia, mirarte ajena pero perfectamente entera, saberte increíble y sobria ante la realidad, me deja saber de tu alma, han disparado por fuera pero no han herido por dentro lo que sabe de tu esencia.
Este día me ha llenado las noches con insomnios que presagio, tengo miedo de salir a las calles y toparme con la cara del acecino de esperanzas, del que trunca sonrisas, del que marca de por vida un llanto continuo que no derrama lágrimas.
Aún así, quiero salir a las calles, aterrada y con espasmos desvelados, y darle la mejilla al loco, para mostrarle la otra y matarlo con mi daga de tristeza.
Pero tú, puedes quedarte en casa, mirando el televisor, yo te abrazo, y tal vez saldremos a cenar un par de veces por semana y aunque no tengas ganas de reír reiremos, sin fuerzas saldrán las carcajadas, y entonces yo seguiré abrazándote.
Porque guardo de ti momentos bellos que sonrío, porque se que tengo silencios para tus males, mas útiles que un desfile de palabras.
Te quiero porque se que eres valiente. Te abrazo porque se que tu corazón esta triste y desesperado.

...sin saber que extrañar, la extraño...

Hoy mire sus letras enamoradas y sonreí, el amor resulta milagroso ante los ojos de cualquiera, a pesar que no sean para mi, me quede prendida a ellas y recordé lo bien que se siente tener un lado de la cama.

Después de leer repetidas veces, extrañe a la musa que me desvelaba, y de nuevo la inspiración se rompe en cuatro, porque no tengo esperanzas de las palabras que dejo sobre mis labios su boca, y la extraño mucho, sin saber que extrañar… la extraño…