"Bob Marley"

yo...

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Vivo del beso de la mujer que busque mi boca, no pretendo llevarme el alma sino dejarle mi corazón...

para saberme...

miércoles, 28 de abril de 2010

Adiós a mi año viejo...


Me sé aún con vestigios de mi antigüedad, no se bien si en el camino pueda desempolvar los restos de angustias y malos sueños que traeré conmigo del año viejo, pero sé que guardo bajo el brazo la humedad, para hacer crecer las flores en el nuevo jardín, inmenso e inmerso en la fábula que le sonríe a éste año que está a punto de parirse.
Dejo en ésta ultima hora todos los recuerdos que envilecen las sonrisas, dejo el miedo al vuelo eterno y al decir que ya no puedo cambiar el mundo con mis dedos.
Dejo en los minutos que me restan los llantos ensordecedores y las ruinas de lo que traté de construir y no pude mantener en pie, dejo mi nombre tachado de celos y mi apellido huérfano de padre. Dejo el miedo a sentirme débil y vulnerable. Los enojos los arranco de mi alma y los convierto en flores, y en este “Perdón” encierro todos los perdones que no he podido pronunciar a los ojos de quien mi corazón ha herido.
Me libero de mi año viejo porque estoy a punto de vivir mi año nuevo, mis bodas de plata con la vida, mi deseo de ser grande, mis ganas de darlo todo hasta quedarme con las manos hinchadas, los brazos alargados, los labios quemados de tanto y tanto amor por la vida.
Este año nuevo creare las canciones mas bellas, y viajaré con mi guitarra a donde los oídos llamen, abrazaré mas a los amigos, comeré menos carne, éste mi año nuevo, amaré mi soledad y no me aferraré a lo perdido, soñaré y soñaré todas las noches mientras duermo y todos los días mientras crezco, trabajare lo triple, grabaré un disco, abrazaré a mi hermana dos veces por semana aunque ella no lo quiera, regañaré menos a los niños y besaré hasta el cansancio a mi madre, éste mi año es mi año para ser feliz.
Gracias a todos aquellos que han hecho de este año nuevo el aprendizaje mas hermoso, los oídos y los brazos que estuvieron atentos a mi voz y a mi necesidad de ser abrazada, a mi gente y a los que no soportan mis ojos, a los que me amaron con todas sus fuerzas, y sobre todo a los que me permitieron amarles con toda mi alma.
Éste mi año nuevo, mi casi recién nacido año nuevo, solamente pretendo… luchar por ser inmensamente feliz, y hacerte feliz a ti…

domingo, 25 de abril de 2010

Ey Che!

Eran las tres menos quince en el reloj argentino, cuando me vi caminando después de un concierto por la Av. Corrientes, donde los murmullos son largos, desvelados y nunca duermen.
En el cruce de Talcahuano, me paré frente al café "El Estaño" y en tan inmensa soledad me imaginé siendo Onassis sirviendo humildemente a Gardel una taza de café.
Me encendí un cigarrillo y seguí mi paso, lento y pausado, mirando fijamente todo cuanto abordaban mis ojos.
Pasé La Giralda, y a unas cuadras quise doblar en Montevideo antes de El Alvear, y justo en el intento me detuvo la voz de una mujer que sin mesura lanzo un grito en mi honor y señalándome los ojos me regalo de sus sonrisas la mejor que dudo olvidar jamás.

-Ey Che! vos me recuerdas a alguien que amé, pero que aún no conozco!

Es imposible describir la expresión que dibujaron esas palabras en mi rostro, con media sonrisa y las cejas fruncidas me detuve en seco como tratando de reconocer aquel rostro totalmente extraño que no dejaba de sonreírme como si supiera perfectamente que jugaba conmigo. Aún así sus ojos inmensos se clavaban fuerte donde sangra la confianza y se rasguña la empatía.

-No lo creo- fue tan solo lo que por inercia resbalo por mi lengua, le sonreí tratando de concluir aquella intervención, baje la cabeza e intente seguir mi camino, cuando de re ojo mire como tomaba su valija del piso y de un brinco estaba a mi lado mirándome fijo.

- A donde vas?- Me cuestionó sin pena
- Solo camino, no tenia el gusto de conocer tan linda calle, algo que recomiendes?-Le contesté
- Te recomiendo la calle, la madrugada en La Avenida Corrientes es para la calle, los rostros mas bellos se encuentran justo donde se cierra el bar y el café, ya que si vos quieres beber algo...
- No, no - le interrumpí -solo pretendo caminar.
- Entonces no veo razón para que necesites una recomendación mía, claro que si la necesitas de urgencia, podría explicarte un puño de maneras de como caminar.

Abrí los ojos del tamaño de un plato y sin tomar un respiro continuó mientras seguía mi paso.

-Existe la manera mas prudente de dar los pasos mirando siempre donde pisas, de ésta manera puedes prevenir cualquier tropiezo, pero acaso no es bello mirarlo todo? Por ejemplo, si caminaras solo viendo el paso a paso, dónde quedaría el teatro Alvear?

Se detuvo sin aviso y dio un girón dejándome de espaldas a sus ojos señalando aquel teatro, caminó en sentido opuesto a mi camino, yo no tuve más remedio que seguirle, o mejor dicho no tuve más que hacer que querer seguirle.

-O por ejemplo El café La Paz, el Teatro San Martín- continuó - y así podría enumerarte toda la Avenida.
También sé de esa forma de andar mirando todo sin mirar el paso, de ésta manera puedes pasar los días tocando el suelo con la cara, y maldiciendo la piedra que te ha hecho caer.

Yo no podía creer que estuviera escuchando todas éstas cosas sin decir una sola palabra,lo único que sé es que perdí la noción del tiempo que seguía andando sin yo darme cuenta que el reloj marcaba ya las cuatro menos diez.

-Yo prefiero éste método- prosiguió en su monólogo, mientras brincaba de repente columpiándose en alguna lámpara de calle haciéndome parar, para esperar que continuara tan prescindible charla- Camino sin mirar afuera, solo dentro donde encuentro las verdades, mis ojos pueden parecer atentos pero siempre mirando donde nadie sabe ver... de esta manera consigo salvarme de vez en cuando del bache y en ocasiones las aceras se clavan en mi mente que se perfecto que deseabas doblar la calle en Montevideo, tal vez en busca de un momento que nunca mas sucederá.

Sonreí al escuchar tan sabio señalamiento, y rompí el silencio de una manera sarcástica- Así que me vienes siguiendo- Soltó una carcajada y respondió.
-Seguramente serás la única en el mundo que dobla en Montevideo y cambia el rumbo perdiéndose de quien sabe que cosa, que jamás pasará.

Debo reconocer que me envolvió en esas cuantas palabras que no me vi con cara de refutar nada.

Ya eran las seis de la mañana, y nos encontramos sentadas finalmente en cualquier banqueta, cuadras lejos de donde comenzó nuestra plática.
El sol salió con prisa y era tarde para abordar mi vuelo camino a casa, en cambio, ella sin prisa saco frente a mis ojos un maletín lleno de pinturas y comenzó a llenarse la cara de colores diversos, soltó su cabello chino y alborotado lo dejo caer a su total voluntad. En cuestión de diez minutos tenía frente a mis ojos un payaso con facciones bellas y una sonrisa que jamás podría olvidar, los ojos mas grandes de lo que por si solos ya eran, los suburbios de su boca delineados de un azul marino y la nariz perfectamente diseñada para dibujar un corazón rojo que aunque bello no hacia perder la atención a tan hermosos ojos color miel.
El silencio se apodero por fin de aquella mujer que, con la luz del día me daba ya, una sensación de infante.
-Debo irme- Dije después de un suspiro grande.
-Yo igual- contestó sonriendo, mientras sacó un crayón color blanco de su maleta, pidió la planta de mi zapato causando en mí como en toda la noche la intriga de no saber que más podría suceder. Garabateo con dificultad, pero finalmente lo consiguió.

- Te enseñaré una forma más de como caminar...

Al mirar en la planta de mi zapato logré descifrar los números que podrían concederme una nueva charla, mi corazón se emocionó a tal manera que por vez primera me mira sin saber caminar.

-Oye! aquí tengo un papel - Me apuré a sacar mi libreta negra que siempre cargo dentro de mi morral.

Sin decir nada se paró de la banqueta y cruzó la Avenida Corrientes, el semáforo estaba en rojo y de su bolsillo sacó una flor de papel que entregó al primer auto que con la que intercambió un par de monedas, le perdí la vista en cuanto el flujo de autos comenzó a correr.

Se sumó a mi soledad crónica una tristeza indescriptible, aún sentía su voz rondando por mi cabeza cuando decidí volver al hotel para recoger mis cosas y dirigirme al aeropuerto, fue entonces cuando escuche a lo lejos aquella voz.

-Ey! che! vos me recuerdas a alguien que amé pero que… -Con sus ojos enormes y su sonrisa perfecta desapareció de mis ojos
En cuanto llegué al hotel cambié de inmediato mis zapatos y me sentí feliz de aun reconocer los números marcados.

Ahora en casa, no se bien si marcar su teléfono, y decir...tu voz me recuerda a alguien a quien amé, una noche en Buenos Aires.

miércoles, 21 de abril de 2010

...despues de ayer?

Hace tanto que no entraba el circo del borracho en mi cadera, en mis brazos dolidos, hace tiempo que el mareo me venia mejor que ahora, y hoy no se que sigue despues de la noche que embriaga del recuerdo que llora...
Lo cierto es que despues de tres tequilas comienzas a hacer falta en todo el cuerpo.
Mi conciencia se turba e inconcientes mis besos te reclaman, y estos brazos tercos que no entienden...

Como se le llama a eso que te tumba al días siguiente después de no tener control ante lo que bebes?
Tengo sed, y sueño...
Peor aún tengo todo los recuerdos... y todas las ganas de un beso... de un beso... de un beso...

jueves, 1 de abril de 2010

ésta ausencia es porque...

...se me escondió la musa en el cajón, y no he vuelto a saber de ella, como hada entretegio sus alas dentro de mis hojas llenas de tinta, y de hace tiempo no la encuentro en mi alfabeto, entonces abandono todo, la guitarra y la armonía, la melodía del viento se difumina en mis sueños y regreso a los días sin canción y sin talentos.

Ahora se perfecto lo que extraño de esa piel callada, limpia de mis manos, exenta de mis labios, ahora se que me hace tanta falta el compás de mis deseos, bailando, imaginandome en su pecho.

Las últimas letras que dejo esa mujer han quedado inconclusas, las tengo aqui y para ella, pero ya no me sirven para nada...

Le vi pintando besos a otra boca
a otro corazón a otra historia
le vi pasar de largo y sonreir
yo que queria sembrar en su jardin mis rosas
Dictar entre sus labios
lo de dos enamorados...

Le vi tejiendo sus manos sutil
acariciar su pelo y comprendí
que es tarde para ir y hablar de amor
yo que queria mostrarle lo que hay en mi corazón
le vi sin decir nada
miré como se marchaba...
.....
.........
...........

...solo intento...sumar horas a tu voz para que puedas nombrarme

Aqui cinco palabras que no puedo decir cotidianemente:







Bella







Mujer







Senos







Toda







La







... y las demás vendrán tejidas y usurpadas de la(s) boca(s) de la(s) mujer(es) que quiera besarme...







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